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Del valle de Los Molles desciende el afluente más importante del Atuel, el río Salado, cuyas nacientes provienen de la conjunción del arroyo Las Leñas y El Desecho .A lo largo de su tránsito por el mencionado valle se encuentran el Pozo de Las Ánimas y la laguna de la Niña Encantada. El río corta el último tramo montañoso formando un profundo cañón casi inaccesible y transitando sus últimos kilómetros en una extensa y espaciosa quebrada llega al Atuel en la zona conocida como Las Juntas.
A lo largo de su tranquilo y zigzagueante cauce el Salado ofrece al pescador con mosca la posibilidad de obtener piezas de buen tamaño y llamativa fortaleza. Conociendo de sus bondades decidimos cerrar la temporada 2006-2007 en las salobres aguas del río en cuestión para lo cual realizamos una salida relámpago que nos permitiera pescar algunas horas en tan noble cauce. Un pronóstico
de mal tiempo y brusco descenso de la temperatura vaticinaba nevadas y fuertes vientos en la zona por lo que desistimos de acampar en el lugar.
El 05 de Mayo de 2007 nos encontró soportando estoicamente las bajísimas temperaturas que en efecto llegaron para anticiparnos que el otoño era ya un hecho. Al frío se sumaron la llovizna y un poco de viento por lo que los intentos matinales debieron esperar un poco.
Durante nuestra visita el río nos recibió con una claridad aceptable y una temperatura que rondó los 9ºC, por lo que las truchas, si bien en un primer momento se mostraron remisas a picar, ya mas avanzado el día se abalanzaban sobre las moscas sin timidez alguna.
Equipos
Los equipos para la zona constan de cañas que van del 4 al 6 con líneas de flote weight forward . Según el nivel de las aguas puede ser necesario el uso de líneas de hundimiento o de líderes de profundidad que en el caso de nuestra reciente visita, estos últimos, fueron convenientes y su empleo rindió los resultados esperados.
Si tuviese que recomendar moscas para este hermoso cauce serian las siguientes: Prince bh, Pérez destroyer, peasant tail, bagre rabit, alguna Wooly wagger en tonos verdosos y en cuanto a secas mi preferida la chernovil ant sobre todo en las barrancas repletas de cortaderas y lanzando desde la orilla opuesta, ver como sube una arcoiris furiosa a devorar un pedazo de foam no tiene precio. Y ya que tocamos el tema del foam, el uso del strike Indicator es muy apropiado pescando con ninfas en las amplias correderas del Salado porque facilita las extensas derivas de las ninfas evitando los molestos enganches que de otra forma son inevitables. Las truchas se refugian junto y tras las irregularidades del fondo en las largas y tranquilas correderas a la espera de la comida
que el agua les acerca y es entonces cuando se hace conveniente el empleo de este accesorio que correctamente utilizado es sinónimo de grandes satisfacciones, …pero claro, en esta salida en particular, el salado nos esperaba con un capricho: wooly wagger naranja bh en tamaño 10!!!
Una captura memorable
El sol se estaba ocultando tras las montañas con lo que el frío empezaba a hacerse sentir con firmeza, y es que en este lugar la amplitud térmica es enorme. La mañana que apenas se asomaba sobre 0ºC en medio de llovizna y viento, se transformó en una tarde maravillosa de cerca de 20ºC y al momento de nuestro retorno no superaba los 2ºC. Con las ultimas luces y habiendo elegido el pozón que cerraría la tarde, lo contemple estudiándolo un par de minutos y decidí abordarlo desde su entrada, pasé desde lejos el largo remanso de unos 50 metros lo mas agachado posible dirigiéndome aguas arriba a la curva que le daba origen. Al llegar al lugar de la entrada del remanso desde unos 5 metros de distancia y pegado al suelo como una piedra me dispuse a lanzar y lo hice teniendo especial cuidado de pasar la mosca primero en las orillas para luego ir abarcando más con el barrido del artificial. Pescaba con la ya mencionada Wolly Bagger BH naranja que ese día terminó llevándose la mayoría de los piques. Los primeros intentos no rindieron y fui avanzando un poco pero nunca perdí de vista la ya poco visible marca marrón del profundo veríl que se insinuaba a unos 2 metros de la orilla por lo que posaba la mosca aproximadamente unos 50 cm. adentro del pozo para luego traerla sobre la línea del veril.
De pronto la línea se detiene como clavada en la arena y doy el golpe ante la presunción de un pique. Lo siguiente fue un estallido en el agua y el reflejo plateado del animal que en complicidad con las últimas luces del día me dieron un espectáculo impresionante. Varios minutos me demandó la tarea de arrimarla y a cada momento parecía cobrar nuevas energías para intentar el escape. Una vez en mis manos se me hizo difícil mantenerla quieta durante la toma fotográfica,
y ya en el agua nuevamente salió disparada como un torpedo en busca de su refugio en la profundidad. Fue la mejor forma de cerrar esa hermosa tarde en El Salado y con ella se fue también una magnífica temporada.-
Conclusiones
La salud de los ejemplares capturados fue excelente durante nuestra visita y su alimentación es evidentemente muy buena.
A pesar de las temperaturas bajas que debimos soportar en horas de la mañana y la tarde,
el agua presentó unos cómodos y estables 9ºC
que beneficiaron en cuanto a la actividad de las truchas.
Sin dudas el Río Salado es uno de esos lugares a donde uno siempre quiere volver esperando revivir las fuertes emociones de visitas anteriores en busca de potentes y salvajes arcoiris.-
NegroGomez
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